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Deb Buckingham y Amy Ross
Pickwick Early Childhood Center
Ottumwa (Iowa)
2022

La investigación de las cosechadoras que se describe a continuación se realizó en forma de una colaboración entre las dos clases preescolares de Mrs. Buckingham y Mrs. Ross con niños del centro de la primera Infancia Pickwick Early Childhood Center. Teníamos 20 estudiantes que asistían a jornada completa. El centro Pickwick sirve a niños de 3 y 4 años sin costo de lunes a jueves. El programa es patrocinado mediante un consorcio de Iowa Voluntary Preschool Programa y Iowa Head Start. El proyecto presente comenzó en octubre y duró como seis semanas.

Fase 1. El comienzo del proyecto

Nuestro proyecto empezó con planes para hacer un proyecto basado en un tema relacionado al otoño. Esperábamos incorporar el Estudio de Árboles de Creative Curriculum. Nuestra predicción era que este enfoque nos permitiría hablar con los niños sobre cambios en el medio ambiente. Como parte de la preparación para el estudio, Deb grabó en video a su esposo mientras él cosechaba maíz. Los niños veían el video y uno preguntó: “¿De dónde vienen las cosechadoras?” Esta pregunta dio un enfoque nuevo al proyecto.

Para aumentar el interés de los niños en el tema, Deb trajo al aula un cabezal de maíz (también llamado cabeza de maíz hocico), que es un componente de una cosechadora de maíz (vea la Figura 1). Pedimos que los niños adivinaran lo que podría ser, la dibujaran y escribieran sobre ella.

Figura 1. Los niños tuvieron la oportunidad de explorar por un rato un cabezal de maíz de una cosechadora real.

Las maestras esperábamos tener sencillamente un proyecto breve. No teníamos ni idea que fuera a expandirse tanto hasta convertirse en una experiencia dinámica y continua de aprender que fue. Resultó que el tema les interesó muchísimo a los estudiantes y procedió a llevarnos bien fuera de nuestra zona de confort.

Al llegar a concluirse nuestra exploración y conversación iniciales, les interesaba a los niños seguir aprendiendo más sobre las cosechadoras. Entonces recogimos sus preguntas sobre los aspectos del tema que querían investigar. También surgieron unos temas relacionados, como la nieve. Estos niños eran inquisidores, y cuando alguien mencionó la nieve, la conversación empezó a tratar también el tema del invierno. Apuntamos las preguntas en nuestro tablero interactivo para poder referirnos a ellas durante el resto del proyecto.

  • ¿De dónde obtienen las rociadoras?
  • ¿Adónde van las lombrices en el invierno?
  • ¿Qué hace el tractor con la nieve?
  • ¿Adónde van las serpientes cuando hay nieve?
  • ¿Adónde van las lombrices de las granjas en el invierno?
  • ¿De dónde obtenemos las vacas?
  • ¿Dónde guardamos las vacas en el invierno?
  • ¿Adónde van los puercos cuando está nevando?

Fase 2. El desarrollo del proyecto

Mientras nuestra investigación de las cosechadoras se iba profundizando, utilizamos el Internet para ver diversos tipos de cosechadoras y las cosechas que podían recoger, inclusive calabazas, algodón, zanahorias, frijoles de soja y maíz. Los niños hacían preguntas en la reunión del círculo mientras leíamos libros o mientras jugaban y éstas daban lugar a la oportunidad de buscar nueva información. Si se descubría un dato especialmente interesante, se compartía con toda la clase cuando nos reuníamos en el círculo. Por ejemplo, nadie sabía que existían las cosechadoras de calabazas, entonces se les enseñó a todos un video en que se las cosechaba en un campo y las maestras aprendimos de esto también.

Nuestro experto invitado, un granjero llamado Mr. Buckingham, enriqueció mucho nuestro proyecto. Por ejemplo, podía hablar con nosotros en el celular en modo altavoz cuando teníamos preguntas, y nos mandaba información sobre tractores y cosechadoras y componentes de los mismos para explorar (vea la Figura 2). También nos dio prestados herramientas, el volante de un tractor, una lata de aceite de motor y muchos elotes para quitar la cáscara. El volante se convirtió en un elemento esencial de la hora de elección libre ya que todos se alternaban en “dirigir” cosas por el aula. A veces se arreglaban sillas y el conductor manejaría un tractor o una cosechadora de fantasía por un campo. Los grandes destornilladores y llaves inglesas que el experto nos proporcionó se usaron para “arreglar” los estantes de nuestro salón de clases y también eran un accesorio del juego dramático para llevar en los bolsillos de los jeans.

Figura 2. Un volante que nos dio prestado un granjero era muy popular durante la hora de juego libre.

Durante este tiempo agregamos una cosechadora de juguete y un modelo de tractor al área de bloques. Los niños hicieron dibujos de observación de la cosechadora (vea la Figura 3), y la utilizaron para “cosechar” semillas de maíz de plástico. Este juguete era extremadamente popular. La cosechadora y el tractor primero se exhibieron durante la hora de elección libre para introducirlos en la clase, y los niños podían escoger dibujarlos si querían.

Figura 3. Los niños hicieron dibujos de observación de un modelo de tractor.

Nuestra visita a un sitio de investigación fue en el negocio de un vendedor de implementos. Los gerentes nos dieron permiso para explorar todos los tractores, cosechadoras y otros equipos. Se permitía que los niños tocaran y se treparan con cautela a las máquinas, y tenían libertad para experimentarlo todo hasta satisfacer la curiosidad (vea la Figura 4). Habíamos planeado hacer dibujos durante la excursión, pero desafortunadamente la maestra no se acordó de llevar las tablas con sujetapapeles al partir de la escuela. Un estudiante de la clase de Mrs. Ross vivía en una granja y servía de experto mientras los niños andaban entre los implementos. A cada uno le tocó un turno de sentarse en la llanta de una cosechadora y experimentar su tamaño enorme, y en un pequeño tractor.

Figura 4. Los niños investigan cosechadoras y tractores durante la visita a un vendedor de implementos.

En la conclusión de la visita entrevistamos al dueño del negocio con una lista de preguntas que habíamos desarrollado en la escuela. La mayoría de las preguntas trataron sobre los colores de los implementos, cómo se cambiaban las llantas y si había súper cosechadoras. Los niños habían formado la teoría que todas las cosechadoras rojas eran súper.

Ver y experimentar la maquinaria real despertó aún más curiosidad en los niños, así que después de nuestra excursión, la investigación cobró más energía mientras conversábamos sobre cómo manifestar lo que habíamos aprendido. Al principio los niños decidieron construir una cosechadora. Luego alguien dijo que debería ser un tractor, por lo que hicimos una votación sobre si debíamos hacer un tractor, una cosechadora o los dos. Los niños dieron votos para construir tanto una cosechadora como un tractor. Luego dictaron una lista de materiales que necesitarían para su construcción, y comenzamos a recogerlos.

Figura 5. Los niños se valieron de la literatura infantil como recurso que los ayudaba a dibujar planes de la cosechadora y del tractor.

A fin de cuentas, los niños construyeron una cosechadora y un tractor. Para apoyar este proceso, dispusimos todos los materiales de construcción que habíamos recogido y les dijimos a los niños que utilizaran sus ideas para ensamblar la cosechadora. Muy raramente he visto a unos niños trabajar tan atentamente. En el salón de clases, donde normalmente hace mucho ruido, había un susurro bajo de actividad. Cada estudiante trabajó en un componente de la cosechadora o del tractor y contribuyó al producto final (vea la Figura 6).

Todos los estudiantes participaron sin importar sus habilidades académicas o sociales. Algunos dedicaron toda la hora de elección libre a trabajar en el proyecto mientras que otros lo hicieron durante unos pocos minutos. Se enfocaron lo suficientemente como para construir la mayoría de la cosechadora y del tractor durante un solo plazo de una hora y media de elección libre. Se agregaron los detalles finales durante los próximos días.

Figura 6. Los niños se enfocaron en su construcción de la cosechadora y del tractor.

Fase 3. La conclusión del proyecto

Cuando todo ya era finalizado (vea la Figura 7), las maestras ayudamos a los niños a colaborar para hacer etiquetas de los componentes de la cosechadora y del tractor. Además, para ayudar a las familias a apreciar lo que habíamos ido haciendo durante el proyecto, exhibimos una serie de fotos durante las citas para padre y maestros. También grabamos en video a cada niño mientras hablaba sobre el proyecto y presentamos el video de cada uno en un portafolio para los padres y madres.

Figura 7. Dos perspectivas de la construcción final de la cosechadora revelan la complejidad del trabajo constructivo de los niños.

Reflexión de la maestra

Nuestra investigación sobre las cosechadoras y el cosechar era significativa por varias razones. En primer lugar, los niños de nuestra región de Iowa veían a menudo los tractores y las cosechadoras en operación en los campos. Pero ya que viven en la ciudad, sabían poco sobre estos implementos. En segundo lugar, muchos de los niños tienen familiares que eran o son granjeros, pero en realidad no estaban muy informados sobre la agricultura ni la maquinaria utilizada por los agricultores. Finalmente, hay una fábrica de la compañía John Deere en nuestra ciudad, en la que trabajan varios familiares de los niños.

La mayor ventaja del proyecto era que los niños se hicieron investigadores mediante libros, videos y experiencias. Al ir completando el proyecto, utilizaron sus habilidades sociales en las áreas de cooperación y persistencia mientras colaboraban para finalizar el proyecto. Los niños han traído estas capacidades a los temas que hemos estudiado subsiguientemente y ahora crean cosas y hacen planes con más intención.

Hemos realizado proyectos anteriormente y nos ha impresionado todo lo que los niños han aprendido, pero este proyecto nos entusiasmó mucho. Siempre hemos creído que los niños preescolares son capaces de estudiar con intensidad pero fue para nosotros una gran fuente de felicidad ver cómo se llevaba esto a la práctica. Aunque este tema no era uno que hubiéramos planeado explorar en el principio, se convirtió en uno de nuestros temas preferidos.

El momento más significante para nosotras era el de observar la intensidad y concentración que los niños utilizaron al crear su cosechadora. Como maestras de niños pequeños, sentimos que se nos inspiraba de corazón la motivación que los niños invirtieron en el proyecto. Esto despertó en nosotras el deseo de proveerles más oportunidades de exploración profundizada.

Un estudiante con el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (ADHD, siglas en inglés) tiene dificultades para concentrarse en cualquier cosa aun durante unos pocos segundos. Este proyecto le permitió ser un explorador y también un líder de un modo que no le había sido posible en otras experiencias de aprender en la clase. Los efectos continuos para este estudiante se ven en su capacidad de planear y crear. Ha canalizado su papel de explorador y líder en nuevos caminos durante el tiempo de arte y también con partes sueltas. No pensamos que él hubiera probado estas actividades sin la experiencia de construir la cosechadora.

Si volviéramos a hacer este proyecto, no creemos que cambiaríamos la mayoría de lo que hicimos. Ciertamente confiaríamos en que los estudiantes nos señalaran el camino de lo que querían aprender. Nosotras aprendimos que podemos confiar en ellos para que determinen qué es importante estudiar.

Sobre este recurso

Este recurso va dirigido a:
  • Programa preescolar

Tipo de programa al que el artículo va destinado:
  • Profesores e instructores

Edad de los niños sobre los que trata el artículo:
Revisado: 2022